Arcilla “tragadolor”
La arcilla constituye un elemento fabuloso para detener los cólicos en los riñones. Sólo tiene que triturarla, envolverla en una tela y rociarle agua tibia. Después coloque esa cataplasma en la zona lumbar y el bajo vientre durante dos horas.
Piso de aceite
Detenga un fuerte dolor en los riñones sumergiendo los pies en un litro de agua caliente, mezclada con dos cucharadas de aceite de romero. Permanezca así hasta que el agua se enfríe por completo y el dolor se haya esfumado definitivamente.
Sí al calor, no al dolor
Lo más inmediato para hacer, en caso de que padezca de cólicos nefríticos, es colocarse una bolsa de agua caliente en la región donde ubique el dolor, ya que el efecto del calor detiene los espasmos.
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